lunes, 21 de marzo de 2016
Coso 123: El “Globito”
Cuando un globo se revienta, provocando el pasmo y llanto de los niños más pequeños y una amarga resignación por parte de los medianos, llega la ayuda de los hermanitos mayores: luego de retorcer despiadadamente una esquina del cadáver del globo sobre sí misma, se materializa un monono “globito sobreviviente”, a la manera de eczema o ampolla del finado. Esta criatura, a diferencia de su cuerpo originario, no puede flotar, patearse ni arrojarse al aire: su única función aparente es ser observado unos instantes y luego reventado otra vez, produciendo una explosión seca y estridente. Su utilidad verdadera es otra: Instruir a las nuevas generaciones acerca del hecho de que el reciclaje es sencillo, noble, posible y completamente inútil.
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Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar¿Estamos hablando de la gente que trabaja dentro de las instituciones del gobierno actual y realmente quiere trabajar a pesar del contexto al que pertenece?
ResponderEliminar...perdón, antes de retorcer hay que chuponear el globo muerto para que el efecto ventosa forme el globito...
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